El papel no va más: desde 2025 será obligatoria la receta electrónica para medicamentos
A medida que se acerca la fecha límite, las plataformas de prescripción tienen que ajustarse a los nuevos requisitos establecidos por el Ministerio de Salud.
El Ministerio de Salud de la Nación, a través de la Resolución 5744 de 2024, reemplaza por completo a partir del 1° de enero de 2025 las tradicionales recetas en papel por las electrónicas.
Desde mediados de año, varias entidades de la medicina prepaga lo venían haciendo con los asociados y también lo implementó la obra social de los jubilados (PAMI), aunque no era obligatorio su uso, como lo será desde el mes que viene.
En el sistema informático de las farmacias se cargan una vez que los médicos autorizados las expiden, las que luego el paciente retira en ventanilla con su carnet de afiliado y el número de DNI.
La adecuación técnica de las redes para poder dar este paso crucial en la modernización del sistema de salud provoca demoras en la fluidez del tránsito de las órdenes en curso, de tal modo que los remedios gratuitos recetados en PAMI, en vías de recomposición, aún no figuran disponibles y, en cuanto se oficialice antes la fecha de vigencia del «filtrado» de subsidios ya comunicado, de hecho podrían entrar en la nueva modalidad y perder la gratuidad.
A medida que se acerca la fecha límite, las plataformas de prescripción tienen que ir ajustándose a los nuevos requisitos establecidos por el Ministerio de Salud.
Plataformas en ajuste
Las 173 plataformas inscritas en el Registro Nacional de Plataformas Digitales Sanitarias (ReNaPDiS) deben cumplir con los estándares técnicos y de seguridad necesarios para operar en el nuevo sistema.
Según el Ministerio de Salud, 136 de estas plataformas han pasado el filtro de validación, y 81 ya fueron aprobadas, mientras que 55 aún están en proceso de adecuación.
Para garantizar la correcta implementación, el Ministerio ha establecido un protocolo claro y detallado para la readecuación de las plataformas de prescripción y repositorios.
Desde el 31 de diciembre de 2024, solo las plataformas aprobadas por el ReNaPDiS podrán operar, asegurando que todos los sistemas utilizados sean seguros y cumplan con las normativas vigentes.
La implementación de la receta electrónica no solo se limita a la digitalización de las recetas, sino que también implica la creación de un sistema integral de validación y almacenamiento de las mismas.
Las plataformas de prescripción, farmacias y repositorios de recetas electrónicas estarán interconectados, permitiendo a los profesionales de la salud prescribir medicamentos de manera más ágil y transparente.
Además, todos los sistemas informáticos que validan y despachan las recetas deberán cumplir con estrictos protocolos de seguridad, garantizando la confidencialidad de los datos del paciente y la integridad de la receta.
Farmacias usarán interfaces de programación
En este nuevo sistema, las farmacias podrán acceder a las recetas electrónicas a través de interfaces de programación de aplicaciones (API), lo que facilitará la dispensación de los medicamentos sin importar la ubicación del paciente o la farmacia.
Esto garantizará que la receta esté siempre disponible, eliminando la necesidad de desplazarse a diferentes establecimientos o lidiar con problemas derivados de la ilegibilidad de la letra manuscrita.
La medida fue fundamentada en el objetivo de mejorar la trazabilidad de los medicamentos y evitar errores comunes derivados de la interpretación de recetas manuscritas, al mismo tiempo que promueve la interoperabilidad entre los distintos actores del sistema de salud.
Según las autoridades, este avance permitirá a los pacientes acceder a los medicamentos con mayor facilidad y, sobre todo, con mayor seguridad.
Protocolos técnicos rigurosos
La Ley N°27.553 exige que todas las plataformas y repositorios involucrados en el proceso de emisión y validación de recetas electrónicas cumplan con protocolos técnicos y administrativos rigurosos.
Entre las medidas de seguridad implementadas se encuentran los mecanismos de respaldo y recuperación de datos, lo que protege la información ante posibles fallos del sistema.
Además, la interoperabilidad entre los distintos sistemas digitales es esencial.
Las plataformas de prescripción deben estar en constante comunicación con las farmacias y repositorios de recetas para garantizar que los pacientes reciban el medicamento adecuado bajo normas de buenas prácticas y con total seguridad.
Esta conectividad también facilitará el seguimiento de la receta, permitiendo a los profesionales de la salud verificar posibles interacciones entre medicamentos y asegurarse de que no se prescriban tratamientos duplicados o incompatibles.
La adopción de la receta electrónica traerá consigo una serie de beneficios claves que mejorarán la calidad de atención a los pacientes y optimizarán los recursos del sistema de salud.
Entre los principales beneficios destacan la reducción de errores médicos, la mayor trazabilidad de los medicamentos, la optimización de la toma de decisiones clínicas por parte de los profesionales de la salud y la reducción del tiempo y los costos asociados con la gestión de recetas.
Interpretación de manuscritos
La digitalización elimina los riesgos derivados de la mala interpretación de la letra manuscrita, los errores de transcripción o la falsificación de recetas, lo que contribuye a una mayor confianza en el sistema de salud.
Además, al estar completamente almacenadas y validadas en plataformas seguras, las recetas estarán siempre disponibles, sin importar el lugar donde se realice la dispensación de los medicamentos.
Fuente: NA